sábado, 31 de diciembre de 2011

Llega el 2012, se va el 2011

Como dijera Baudelaire, que el 2012 llegue con "calma y voluptuosidad". Que traiga la belleza de leer un poema, del pensar y del gesto amoroso.

Felicidades a todos.

jueves, 29 de diciembre de 2011

Feliz Año Nuevo


Así me preparo para despedir el año 2011; en la cena de Navidad vino el Niño Dios a traerme este regalo: una sombrilla de color azul y amarillo. ¿Cómo supo él que soy de Boca?; no sé; tal vez me haya visto en los festejos de la Bombonera, o quizás sabe de  mi desde niño. Ésa es la verdad. Me conoce de toda mi vida.

Pero bueno, ahora estamos al cierre del año, va quedando atrás el año de mis cincuenta y cuatro. Se viene el nuevo año de mi nueva edad; llegaré a los cincuenta y cinco. Es más de la mitad de mi vida, voy en el trayecto divino que la naturaleza nos tiene preparado.

Pero soy feliz; he vivido este año con especial entusiasmo, he leído poesías muy lindas, de las ya conocidas y de las que el género me puso en nuevo contacto; he conocido espacios de arte maravillosos, tomé contacto con nuevas pinturas y me atreví a escribir mis propios poemas y hasta a leerlos en público.

Por todo lo vivido en el año y por todo lo que está por vivirse en 2012, saludo a mi familia, a mis amigos y a todos los que me conocen con el mejor deseo de mi corazón y con la paz espiritual de mi alegría.

miércoles, 21 de diciembre de 2011

Bienvenido Céfiro - Hola cálido verano


Bienvenido Céfiro,
hijo de Astreo y de Eos,
dios del viento del oeste
(uno de los vientos buenos, al decir de Hesíodo).
Céfiro, eres el dueño de las cálidas
y suaves brisas de la primavera; llegas 
al comienzo del verano.

Hoy vienes desde la mitología
hasta nuestra actualidad;
voy a recibirte en mi corazón,
porque si eres cálido
y si vienes del oeste todo lo bueno traerás.

Me acompañarás tres meses,
compartiré contigo hasta
un año más de mi vida.
Es la estación del sol,
de aquel que me llevó
siempre de la mano
desde mis primeros pasos.

Te espero viento del oeste,
de manto suave
y cálido para envolver
de colores claros mis días.
Quédate conmigo todo el tiempo,
que aunque tenga su límite,
llegará, me rozará y no se irá de mi.





En la ilustración, el dios Céfiro y la diosa Flora, en un cuadro de William-Adolphe Bouguereau (1875)

martes, 13 de diciembre de 2011

Boca Juniors, Campeón Apertura 2011




Y ha sido así nomas. Tal como la hinchada lo pidió; Boca es el Campeón del Apertura 2011. Por fin, llegó el día del festejo. Es el 11 de diciembre de 2011. Tantas tardes y noches de bajones ante un resultado adverso de campeonatos pasados, pero ahora llego el premio; los jugadores relajados caminando la vuelta olímpica. Esta vez antes del partido; el domingo pasado, la rienda suelta se dio después de ganar el encuentro.

Ayer se jugó como si hubiera sido el primer partido del torneo. A ganar. A meter pierna fuerte en el medio campo y la defensa y a ir a todas arriba. El último gol del torneo ha sido, para mi, todo un premio al despliegue de Erviti.

Ahora, a festejar y a relajarse; y para eso nada mejor que la danza de las chicas que acompañaron la celebración cuando caía la tarde en la Boca y el pueblo estaba feliz, como Riquelme, el más grande de todos. 

jueves, 8 de diciembre de 2011

Diego Rivera

Hoy se celebra el 125° aniversario del nacimiento del eximio pintor y muralista Diego Rivera, cuyo nombre original, con el que fuera registrado al nacer era Diego María de la Concepción Juan Nepomuceno Estanislao de la Rivera y Barrientos Acosta y Rodríguez.

Uno de los sucesos más controvertidos de su vida se dió cuando el industrial John D. Rockefeller lo contrata para pintar un mural en el vestíbulo de entrada o "lobby" del edificio que se denominaría Rockefeller Center.

El edificio, situado en Fith Avenue, una de las avenidas más famosas, se posicionaba como uno de los emblemas más importantes del capitalismo. Rivera, diseñó para esta ocasión el mural denominado "El hombre en el cruce de caminos". Pero, cuando estaba a punto de completarlo, incluyó un retrato de Lenin. Rockefeller vio el retrato como insulto personal y mandó a cubrir el mural y luego ordenó que fuera destruido. Rivera regresó a México y pintó el mismo mural en el tercer piso del palacio de Bellas Artes.


Rivera, tuvo tres esposas, siendo Frida Kahlo la última.

lunes, 5 de diciembre de 2011

"Buenos Aires es Poesía" - Mi poema en el aire de Barracas

El Consejo Profesional de Ciencias Económicas de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires organiza, mensualmente, una salida cultural de la cual trato de formar parte en cada oportunidad que se realiza.
En el mes de Octubre de este año, la salida se llamó Buenos Aires es Poesía y abarcó un recorrido por diversos lugares de la ciudad donde estuvieron presentes, en su época, Alfonsina Storni, Leopoldo Lugones y Horacio Quiroga.

Cuando empezó el recorrido en la Avenida de Mayo, la guía del tour explicó como sería el recorrido y que ella iría relatando jugosas anécdotas de los escritores, lo cual rápidamente disparó mi atención. Dijo también que el final del paseo sería en Espacio Icalma, un lugar de Barracas donde ella recrearía una tertulia, a la manera de los grandes literatos de aquella época, donde todos, incluidos los integrantes del grupo, podrían leer obras de Alfonsina, textos o poemas. Aquí me interesé más todavía y de inmediato pensé en recitar mi poesía "La Avenida, mi avenida".

Como no tenía el texto encima, a través de mi teléfono ingresé en mi blog y la copié en mi anotador de bolsillo. Luego de un hermoso andar por distintos lugares de la ciudad, tal cual el plan trazado, llegamos al Espacio Icalma; este es un maravilloso lugar enclavado en un barrio que respira arte al punto tal que las casas del Pasaje Lanín ostentan artísticos frentes con hermosos colores.

Ya en el Espacio, un lugar cálido para este tipo de reuniones, la narradora relató anécdotas y recitó poemas de Alfonsina. Nos dio un placer enorme verla y escucharla. A su finalización, nos invitó a leer lo que quisiéramos de los libros que estaban en el salón esperando su lector de turno. Algunas colegas leyeron poemas con emoción y a todos nos gustó mucho.

Cuando terminaron las lecturas, la narradora preguntó si alguien más quería leer y me quedé callado. Mi timidez me estaba jugando su pasada acostumbrada, pero una de las colegas presentes, a quien yo le había dicho que tenía intenciones de leer, me dijo que lo hiciera. Ese empuje fue fundamental para mi.  Dije a la narradora y a los presentes que quería leer un poema escrito por mi. Me dio la palabra no sin antes mostrar su interes por escuchar.

Expliqué de qué se trataba mi poema "La Avenida, mi avenida" y empecé a leerla. Me sentí muy cómodo a medida que avanzada en los versos y percibía la atención de todos. Cuando terminé, escuché los aplausos de mis colegas y vi a la narradora también aplaudiéndome y dándome su apoyo.


Esa ha sido una experiencia tan fascinante como inolvidable para mi. Haber formado parte de una tertulia de escritores y también haber leido unas líneas escritas por mi, ha sido como alcanzar el cielo con las manos. Me resulta difícil explicar mi alegría, pero puedo decir que ese hecho me hizo el hombre más feliz del mundo, en mi intimidad. Llegaron a mi memoria los versos de Neruda cuando dijo "soy / resplandeciente con mi cuaderno" y "soy / sosegado en la alegría"   



 Este es mi poema:

Centro de mi pueblo,
alma de mi ciudad,
con tu recuerdo tiemblo,
eres mi libertad.
Desde niño te conozco,
alma de mi ciudad;
nada de lo que me diste es poco
eres mi sinceridad.
Hoy desde lejos te quiero
en mis noches de desvelo,
tienes mi voluntad
en mi alma, en mi ciudad.

Mis agradecimientos:
- A la Dra. Susana Santorsola por haberme insitido en que leyera mi poema. Además, ella tomó las fotografías  que ilustran esta entrada.
- A la narradora Silvia Pereyra, por darme un lugar y apoyarme en el recitado.
- A la Dra. Liliana Alvarez, por coordinar con alto profesionalismo este tipo de eventos.
- A todos mis acompañantes del paseo por su atención, su aguante y su reconocimiento. 

sábado, 3 de diciembre de 2011

Las nubes de Jean Degaré


Antes que nada, quiero explicar el porqué del nombre Jean Degaré. Resulta que yo viví en Francia, aunque algunos busquen desacreditar mi experiencia. Digo así porque, cuando lo menciono, dudosos me preguntan cuánto tiempo residí en el país galo, a lo que yo respondo: tres días. Considero que ese tiempo es también una medida en la vida. Alguna vez Violeta Parra dijo que la vida es eterna en cinco minutos.

Volviendo a mi residencia en Francia, diré que allí aprendí palabras y nombres que se utilizan todos los días en nuestras tierras y nosotros, sin saberlo, estamos usando terminología francesa, aunque no pronunciación.  Jean Degaré es un ejemplo; aquí se llama Juan de Garay, pero yo lo pronuncio recordando gratamente mis tres felices días de vida en París.

Otro vocablo que yo utilizo fluido pero con entonación “Miterrandesca” es locutuar, que sería locutorio. Con pena voy también a algún velatuar; o haría muchos viajes si ganara la loteruá; deduzca el lector a qué palabras me estoy refiriendo.

Ahora bien, cuando voy en el auto desde el centro hacia el olvidado sur por Jean Degaré, veo que las nubes de esa avenida me acompañan. Las miro (y me miran) trasladándose ufanas sobre el cielo azul en mi misma dirección; yo voy del centro a Pompeya; ellas quizás también. Hice este comentario en un círculo cercano y se me observó esta afirmación o el relato, porque, me dijeron, las nubes siempre están en movimiento. Acepto esa aserción, pero no la fundo. Yo creo que esas nubes se desplazan sólo cuando yo paso.  

Ellas me esperan firmes sobre el cielo, alertas de mi espera y, cuando aparezco, se toman de sus blancas manos y me acompañan. Si el día está nublado no voy por Jean Degaré, porque sé que ellas no están, pero no sabré dónde se han ido. Me animaría a preguntarles e imagino el diálogo:

-          Ayer pasé y no me acompañaron.

-          No puede ser, nos desencontramos.

-          Ocurre que la luna nos dijo que ibas en la noche viajando de sur a norte, para el lado de Tucumán y quisimos acompañarte.

-          No las vi, viajaba en mis sueños.

-          Nosotras si te vimos, te encontramos en la oscuridad y te acompañamos. Viajaste mucho, llegaste y te perdimos.

-          Llegamos hasta los cerros y les preguntamos. Nos dijeron que estarías en la avenida. Hasta allí fuimos. Alguien nos dijo que ya habías vuelto. Nos gustó mucho el lugar y nos quedamos en la avenida.

-          Cuándo volverán, pregunté.

-          En ningún tiempo se sabe, me respondieron.
Julio San Martín, 3/12/2011



jueves, 1 de diciembre de 2011

Hola, diciembre 2011, bienvenido

Lindo día para empezar el último mes del año. Hola, diciembre de 2011, te he esperado todo el año; llegaste lento pero seguro; ahora estás aquí conmigo. Sol, aire caliente, vientos de verano se acercan, todo está por empezar, pero todo está terminando. Me siento bien acompañado con tu llegada, un diciembre más en mi vida, no es poca cosa. Busco en mis papeles un símbolo para recibirte y encuentro un poema de Pessoa. Que bueno, Pessoa no había venido todavía a este blog. Con el inicio de un nuevo mes llegas también tu, don Fernando Pessoa.

Ayer estuve en el bar "Las Cuarenta" en la avenida Boedo. De fondo había una canción rara para mi; pregunté a la señora de la barra y me dijo que el señor que estaba sentado enfrente mío era el dueño del disco. El señor, muy amable, me dijo que era una cantante de Lisboa, mientras me alcanzaba el disco. Lei los nombres de las canciones y sus ritmos. Eran fados. Me acordé de Pessoa; le dije al tipo: la tierra de Pessoa, o de Ricardo Reis,me dijo él. Sabía el señor.

Esta es la Oda para recibir el mes:

Para ser grande, sé entero: nada
tuyo exageres o excluyas.
Sé todo en cada cosa. Pon cuanto eres
en lo mínimo que hagas,
por eso la luna brilla toda
en cada lago, porque alta vive.