domingo, 14 de abril de 2013

Instrucciones para enfriar el mate cocido








Una de las razones por las que me gusta el "Gran Verano", como lo llamara Neruda, es porque puedo utilizar mi método para enfriar el mate cocido. Mi forma preferida de saborearlo una tarde, aunque el impiadoso sol quiera meterse hasta en mis huesos, es en un jarro amarillo de losa, y si está "descascarado", mejor.

Como la temperatura exterior sumada a la del jarro y a la de la verde esencia de agua hervida y yerba San Martín (de la Cooperativa), hacen trepar el termómetro, para sentir el sabor de las tardes tucumanas, se aplica el siguiente proceso:
 
  • Vertir agua del caño en un plato hondo. Si en ese plato suele servirse sopa de fideos "lengua i' pájaro", mejor.
  • Ubicar el plato en la mesa en el lugar donde se sentará el feliz degustador del mate cocido.
  • Servir el mate cocido en el jarro y colocar éste dentro del plato hondo con agua.
  • Agregar dos cucharadas de azúcar, que sea una cuchara grande, la misma de la sopa, es imprescindible.
  • Menear con la cuchara el mate suavemente de un lado a otro, como siguiendo los pasos de una zamba, mirar a los demás comensales, si entre ellos hay una dama, mejor; mirarla como se mira a la compañera en una zamba, como si se quisiera comérsela con la mirada.
Así como la sombra del cerro baja hasta el fondo de mi casa al caer la tarde y refresca el espacio de mi presencia, el agua del plato irá enfriando el mate. El calor traspasará el jarro amarillo y se bañará en el agua del plato que, poco a poco, irá dejando de ser fresca.

 
  • Introducir el dedo índice de la mano derecha en el agua del plato para saber si la temperatura de ésta se ha elevado. Si es así, estaremos frente a una prueba casi irrefutable de que el mate cocido está listo para ser degustado.
  • Probar con un pequeño sorbo para saber cómo está el mate.
  • Si el sabor engalana la boca, el mate está listo.
La temperatura del jarro ha variado con este método. Así de simple es; se ha aprendido en la casa en alguna feliz tarde, que aún no ha terminado, de la infancia.

1 comentario:

  1. Verónica León: Toda una ceremonia!!!!Hermoso!!!!
    Hace 6 horas · Editado · Ya no me gusta · 1


    Mirta Rodriguez Como toda cosa tan nuestra es un poema hasta para enfriarlo,rico y simple.
    Hace 6 horas · Ya no me gusta · 1

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