lunes, 9 de enero de 2012

"Que se quede el infinito sin estrellas"

Algún día podría darse este pedido del poeta que lo hizo célebre; pero ¿qué pasaría si cada una de las estrellas bajara y se instalara en este nivel de la tierra?

Una novia tendría en sus manos lo que el novio le regaló en algún cumpleaños. Diría; ¿ésto es, brillará ahora en medio de esta luz o, qué bueno, serviría para alumbrarme cada vez más cerca?. Pero no tendré más noches de estrellas junto a mi amor.

Las madres, los padres, los hermanos y hermanas, los amigos que se fueron de esta tierra y que hoy viven en la Constelación Orión formarían una nueva constelación a nuestro lado, después de tanto soñar.

Caminaríamos por las calles consteladas. Unas habrán venido del techo del mar y la gente navegante no tendría qué contemplar ni cómo guiar su proa; irían sin rumbo hacia algún lugar. O este sería el mar sin fin, necesitarían de Orfeo, que haría pentagramas nocturnos con su voz, pero quién sabe si podría darle sus formas y luminosidad.

Vendría hacia nosotros la imagen de Heracles, luchando contra los ligures en su constelación llamada Engonase, que Zeus le ofrendó compadecido por sus lágrimas.

¿Cómo podrían los Reyes Magos encontrar el pesebre con el Niño Divino?
Julio Jordán Benjamín Lezcano
Enero de 1995

Ilustración:  "El cielo nocturno de Punta Mogotes" - Fotografía tomada por mi, en una noche sin estrellas en  enero de 2012. 

2 comentarios:

  1. muy bueno!!!! vivan las estrellas en la tierra

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  2. Gracias, Anónimo por su comment. Si se hiciera realidad la imaginación del poeta, las estrellas estarían en la tierra y usted se alegraría.

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